martes, 25 de noviembre de 2008
Consumismo
Consumo Responsable
Hoy en día una de las grandes problemáticas mundiales es el consumismo. Es sorprendente observar como cada día la gente gasta su dinero desmesuradamente sin ninguna importancia, sin tomar conciencia y darse cuenta de que los recursos no son infinitos e inagotables.
Cabe señalar que los 20 países más ricos del mundo han consumido en este siglo más materia prima y recursos energéticos no renovables, que toda la humanidad a lo largo de su historia y prehistoria.
Como se señaló en la Cumbre de Johannesburgo, en el 2002: “El 15% de la población mundial que vive en los países de altos ingresos es responsable del 56% del consumo total del mundo, mientras que el 40% más pobre, en los países de bajos ingresos, es responsable solamente del 11% del consumo”.
¿Por qué razones consumimos a grandes cantidades?
Una de las principales actividades del ser humano es ir de compras en otras palabras consumir. Esto se debe, en la mayoría de los casos , por el impulso de conseguir las ultimas modas, dirigido por los estereotipos sociales, los anhelos por conseguir una vida mejor. En tanto en cuanto el consumo está más “dirigido” por estos factores y no responde a expresiones de libertad personal, los resultados de nuestras acciones conducen necesariamente a la frustración y a la necesidad de continuar consumiendo para alcanzar la felicidad que se presupone existe tras el consumo de determinados bienes. Pero esto,
efectivamente, nos conduce a llevar a cabo un consumo que es sinónimo de “agotamiento”.
Debemos tener en cuenta que consumir no es sólo satisfacer una necesidad o un deseo individual, aunque ésta es la percepción que tenemos habitualmente. Al consumir estamos colaborando en todos los procesos que hacen posible el bien o servicio consumido, seamos conscientes o no de ello. Y estos tienen implicaciones de carácter económico, social y medioambiental.
Repercusiones del consumismo
Entre las principales repercusiones que conlleva el consumir a grandes cantidades nuestros recursos están:
a) El consumismo aumenta las diferencias existentes entre los países desarrollados y los países del tercer mundo.
b) Dentro de los propios países se acentúan las diferencias entre las personas generando bolsas de pobreza.
c) El consumismo agota las reservas naturales y aumenta la cantidad de residuos produciendo un deterioro en el medio ambiente.
d) Las personas atrapadas por el círculo consumista pierden su propia identidad, al confundir lo que son con lo que poseen.
e) Las personas consumistas se sienten desgraciadas cuando no pueden comprar el objeto o la experiencia deseada. Pero cuando lo consiguen se sienten igualmente insatisfechos y desgraciadas. En suma, el consumo no es un modo adecuado ni inteligente de lograr la felicidad.
Por todo esto, podemos afirmar que el consumismo es injusto, insolidario y deshumanizador. Es injusto e insolidario tanto con respecto a la mayoría de la humanidad, que no tiene acceso a bienes y servicios esenciales, como con respecto a las generaciones futuras, que se encontrarán con una naturaleza agotada y contaminada por las ansias consumistas de sus precedentes. Es deshumanizador porque desvirtúa la identidad de las personas y no conduce a la felicidad.
¿Qué podemos hacer ante el consumismo?
La única manera de disminuir el consumismo que se genera hay en día es por medio de la educación. Es de vital importancia enseñar y aprender de que los recursos son limitados y hay que utilizar solo lo necesario ya que es para el beneficio de todos. Tenemos que actuar ahora ya que cambiar esta mentalidad consumidora es muy difícil ya que es las culturas estad acostumbradas a gastar por eso se dice que estamos en una cultura de consumo.
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